Rentas y gastos familiares

En Suiza los precios son más alto que en el resto de Europa. A pesar de ello cada hogar ahorra más de una décima parte de la renta.

Una familia visita una exposición
© DFAE, Presencia Suiza

En el año 2014 la renta bruta de un hogar medio suizo se situó en 10.079 francos. El 63,1% de la renta recayó sobre actividades salariales, el 12,5% sobre ingresos de actividades autónomas, el 4,3% sobre rentas de capital y alquileres, el 18,9% sobre rentas y prestaciones sociales y el 1,2% sobre subsidios provenientes de otros hogares. 

En el año 2014, los hogares suizos gastaban un promedio de 8.927 francos al mes. Los suizos destinaron por ejemplo 2.736 francos (el 27,1% de los ingresos brutos) a contribuciones sociales, impuestos y seguros de enfermedad, 642 francos (6,4%) a alimentos y bebidas no alcohólicas, 1.488 francos (14,8%) al alquiler y la energía, 827 francos (8,2%) al transporte y 571 francos (5,7%) a actividades del ocio y la cultura y 188 francos (1,9%) a la comunicación. Al mismo tiempo consagraron 1.544 francos al ahorro (15,3%). 

Suiza es un país caro. El nivel de precios en Suiza superó en 2015 por un 63% la media de la Unión Europea. En marzo de 2017, los precios medios en Suiza fueron un 54% más caros que en Francia, un 59% más que en Alemania y un 61% más que en Italia. Solo Islandia se encontraba en una situación similar a la de Suiza (un 2% más caro que Suiza). Suiza en su conjunto no es cara si se toman los elevados salarios como referencia. En 2015, un suizo tenía que trabajar 5 minutos para comprarse 1 kilogramo de pan, mientras un ciudadano del mundo tendría que trabajar 19 minutos. Parecidos son las proporciones respecto del arroz (5 minutos de trabajo en Suiza frente a los 18 minutos a escala mundial). 

En los últimos años se han registrado en Suiza importantes fluctuaciones de los precios como consecuencia de la crisis financiera de 2007/2008 y los problemas en la zona euro. En 2016, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) disminuyó un 0,8% con respecto al año anterior. Ya en 2015 se había registrado una reducción del 0,8%. El IPCA subió por ejemplo en los años 2008 (+2,4%) y 2010 (+0,6%). Gracias a la alta cotización del franco con respecto al euro y otras monedas, se han abaratado considerablemente los bienes de importación.