La Cooperación Suiza y el Código de las Familias, Parte II

Novedades locales, 20.04.2022

La voluntad política para la toma de decisiones de tanta relevancia como la aprobación mayoritaria del nuevo Código de las Familias es indispensable pero no suficiente. 

Código de las Familias Cuba
Código de las Familias Cuba © Portal Cuba

El respaldo de la población es vital y para ello, se necesita educar a las personas tanto en el contenido del Código en sí, como en la sostenibilidad y la praxis cotidiana de las pautas abordadas. En definitivas el Código de las Familias es un paquete legislativo que da sostén legal a lo que debería ser una práctica común en la sociedad: amar y ser amado con dignidad.

Teniendo en cuenta que para ser bien acogido por la población, la educación se hace primordial. Cultivar a las personas en términos de inclusión social, igualdad y equidad, justicia y no discriminación. Por eso el apoyo de la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE) puede abordarse desde muchas aristas y con larga data en el trabajo educativo.

En el portafolio actual de trabajo de COSUDE se estructuró en un ámbito único, la contribución al desarrollo local participativo e inclusivo y se dividió en cuatro áreas temáticas. Una de ellas, Género e Inclusión Social, figura como tema transversal orientado a ofrecer a la gestión local enfoques, herramientas y recursos para la implementación de proyectos que promueven la equidad social y de género, así como el fortalecimiento de las capacidades de especialistas, autoridades locales y nacionales como también la colaboración con instituciones culturales para la implementación de políticas de inclusión, la información ciudadana sobre derechos de género e igualdad y la contribución a disminuir las brechas de injusticia social. No solo educar sino fomentar acciones inmediatas: apoyar emprendimientos, generar nuevos empleos, garantizar que mujeres y grupos vulnerables por exclusión social tengan acceso a los servicios públicos y la seguridad social, promover acciones para satisfacer las necesidades sociales y económicas de todos los segmentos poblacionales, en particular mujeres, adultos mayores, niños y niñas, adolescentes y jóvenes, comunidad LGBTIQ+, así como prevenir y enfrentar todas las formas de discriminación.

Las líneas de colaboración suiza en lo referente a género e inclusión incluye el apoyo a programas políticos de gran envergadura como el Programa para el Adelanto de la Mujer y el nuevo Código de las Familias, la cooperación con redes y organizaciones sociales en temáticas de inclusión y la visibilización y sensibilización a autoridades y sociedad.

Para ello, COSUDE ha colaborado con disímiles organizaciones estatales y de la sociedad civil que contribuyen, cada una desde su área específica de trabajo a la disminución de la desigualdad y a la creación de nuevas oportunidades para los sectores menos favorecidos.

La Plataforma de Promoción de la Equidad de Género con Incidencia Nacional (PEGIN), por ejemplo, es liderada por COSUDE desde el año 2012 e implementada de conjunto con la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), el Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX), la Unión Nacional de Juristas de Cuba (UNJC), la Red Iberoamericana y africana de masculinidades, el grupo de reflexión y solidaridad Oscar Arnulfo Romero (OAR), el Proyecto Palomas entre otras que se han sumado a lo largo de los años. Esta se encarga de la promoción a nivel municipal de la acción afirmativa a favor de las mujeres, vía proyectos pilotos de capacitación y acceso a empleo, el fomento del trabajo en red entre actores que promueven la no-discriminación, la conformación de plataformas para el diálogo en las discusiones parlamentarias para la promoción de los derechos de las mujeres, la producción y difusión de materiales comunicativos para sensibilizar a la población y a los decisores gubernamentales.

Grandes proyectos como AfroAtenas-Callejón de las Tradiciones son apoyados por COSUDE. Proyectos como este tienen miles de beneficiarios, sin contar los favorecidos de forma indirecta, números que incluyen sobre todo a mujeres, a la comunidad LGBTIQ+, personas con discapacidades físicas o intelectuales, los habitantes de barrios marginalizados, las víctimas de discriminación por cuestiones de raza, sexo o territorio, etc. Proyectos así constantemente trabajan sobre las bases sociales que permitan la aprobación y el cumplimiento de un nuevo Código de las Familias. Fundamentalmente con dos vías de actuación: la educativa, abriendo talleres de capacitación con especialistas en las materias impartidas, clases con juristas y otros cientistas sociales para explicar a la población cómo les beneficia el nuevo paquete legislativo, y la vía de la acción directa convocando actividades de participación popular y priorizando la inclusión, haciendo protagonistas a los grupos menos privilegiados, creando centros de acogida para mujeres víctimas de violencia de género, brindando ayuda directa a niños, niñas y adolescentes que se encuentren en situación de violencia intrafamiliar, convocando a marchas masivas en todo el territorio cubano con caravana de la comunidad LGBTIQ+ en apoyo al nuevo Código de las Familias, creando redes con las instituciones, el gobierno, y contando con el apoyo de la sociedad civil y la colaboración internacional.

La creación y gestión de proyectos en el ámbito agropecuario que trabajen sobre el principio de favorecer el acceso de la población cubana a una alimentación sana, derivada de una producción sostenible y el apoyo a la política gubernamental de Soberanía Alimentaria también contribuyen a la inclusión y a la lucha por la igualdad social, ya sea generando empleos, brindando ayuda a las mujeres del sector rural que tiene más abierta la brecha de desigualdad social por cuestiones culturales, aumentando el ingreso al hogar, creando talleres y encuentros destinados al debate de estas cuestiones en los que incluso participan matrimonios y familias dedicados al trabajo agropecuario desde las cooperativas. Como ejemplo se pudiera citar al Proyecto de Gestión Cooperativa en el Sector Agropecuario (APOCOOP), que promueve la creación de organizaciones no estatales destinadas a la prestación de servicios y productos para mejorar la productividad de pequeños productores y cooperativas agropecuarias que garantizan la inclusión de mujeres con mano directa sobre la tierra o en su vertiente comunicativa y educativa, donde además los niños, niñas y adolescentes son beneficiarios, respaldando el nuevo Código de las Familias y defendiendo valores importantes para la lógica de trabajo y las metas que incluyen la justicia social, la igualdad de género, la responsabilidad familiar y la equidad de derechos en el sector rural.

Podemos mencionar de igual manera el apoyo a diferentes autores de investigaciones históricas y sociales, escritores, artistas e intelectuales que se especializan en temas de justicia social y equidad de derechos. El desarrollo de la investigación histórica que permitió la creación de un símbolo feminista y de disidencia sexual como Enriqueta Favez que luego llegó en sus diferentes versiones artísticas hasta su ciudad natal en Lausana, Suiza. El apoyo al Proyecto Palomas como protagonistas del activismo feminista cubano, la sinergia con especialistas y centros fundamentales para las luchas sociales en Cuba como el Centro Félix Varela, la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), la Federación de Mujeres Cubanas (FMC).

Muchos son los proyectos que conforman la larga lista de áreas de trabajo que COSUDE ha desarrollado para potenciar la dignidad humana, promulgar los principios de igualdad y no discriminación, pluralidad y responsabilidad, impugnar la exclusión, la violencia, la desprotección y resaltar derechos y garantías de niños, niñas y adolescentes, ancianos y ancianas, personas con discapacidades, personas de la comunidad LGBTIQ+ y  personas víctimas de violencia de género. Sabemos, además, que nunca será suficiente la agenda en que estos temas sean protagonistas, no se culmina el trabajo sobre el culto a la dignidad de las personas, al respeto y a la protección de derechos, por tanto incentivamos la continuidad de cada uno de estos programas y proyectos en beneficio de la población cubana.

COSUDE, desde los principios de cooperación que nos distinguen, respalda el nuevo Código de las Familias y reconoce la valía del texto para defender los principios de igualdad y no discriminación y la proclamación de derechos inalienables que permitan amar y ser amados por igual, desde el respeto y la responsabilidad afectiva que, en definitivas, guía el camino de una sociedad hacia el culto pleno a la dignidad.