El Programa Global Migración y Desarrollo de la COSUDE promueve el potencial de los migrantes para un desarrollo sostenible mediante condiciones marco adecuadas en los países de origen, tránsito y destino. Asimismo, apoya las iniciativas de organizaciones de la diáspora.
En el punto de mira de la COSUDE
Las prioridades y actividades del Programa Global Migración y Desarrollo (PGMD) de la COSUDE en el ámbito de la diáspora se basan en tres pilares:
- Mejorar las condiciones marco: El GPMD contribuye a la creación de las condiciones políticas, jurídicas y sociales para que las experiencias de los migrantes puedan producir el mayor impacto posible. Para ello, el GPMD coopera con las autoridades nacionales y locales en los países de origen y elabora con ellas estrategias y planes de acción que promuevan la diáspora como actor del desarrollo.
- Crear capacidades: El GPMD fortalece las capacidades organizativas de los miembros de las organizaciones de migrantes para que puedan poner en práctica sus ideas y conceptos. Ello requiere conocimientos de gestión de proyectos y una sensibilización sobre el valor añadido que los migrantes crean para la cooperación al desarrollo.
- Trabajar con la diáspora: Junto con organizaciones de migrantes seleccionadas, el GPMD elabora proyectos para evaluar las posibilidades y los límites de la cooperación y desarrollar formas de cooperación.
Contexto
Los estudios demuestran que los migrantes bien integrados en el país de acogida realizan una importante contribución al desarrollo de su país de origen. La integración y el compromiso con el país de origen no se excluyen mutuamente. El potencial económico y sociocultural que puede ofrecer la diáspora desempeña un papel esencial para el desarrollo de los países de origen. Los inmigrantes envían dinero a sus familiares y amigos e invierten, a través de pequeñas empresas, en el desarrollo de su país de origen. Pero también en el país de destino, a través de la transferencia de competencias, conocimientos y experiencias, contribuyen al desarrollo de su país de origen. Los miembros de la diáspora se mueven entre dos países, pues conocen las condiciones de vida tanto en el país de origen como de destino. En el debate sobre la futura cooperación al desarrollo, los migrantes revisten cada vez más importancia. Las colaboraciones más estrechas entre los Estados, las organizaciones de desarrollo y los migrantes permiten aprovechar mejor el potencial de la migración.
Desafíos actuales
A pesar del creciente número de nuevas iniciativas en las que participan las organizaciones de la diáspora, son necesarias al mismo tiempo una colaboración eficiente, la coordinación y conceptos sostenibles. Muchos países de origen han empezado a tener en cuenta la diáspora en su planificación para el desarrollo, sus estrategias y planes de acción. Otros países de origen aún carecen de las condiciones necesarias para utilizar el potencial de sus miembros de la diáspora en materia de desarrollo. Una cooperación más estrecha de los actores que reconocen el potencial de la diáspora abre nuevas perspectivas para el desarrollo en los países de origen.